martes, 17 de diciembre de 2019

LA PRESENTE EDICIÓN ESTARÁ VIGENTE DEL 17 DE DICIEMBRE 2019 AL 4 DE ENERO 2020

En esta nuestra 34 edición vamos a dar respuesta a varias  preguntas que nos fueron planteadas por nuestros amigos y amigas lectores. Y que nuestro biblista y teólogo cibernético va a tratar de responder gracias a su contante espíritu de investigación.
Es muy importante tener claro que lo más importante cuando leemos la Biblia es estar seguros de que hemos comprendido todo el significado de las palabras y sobre todos de algunos conceptos relacionados con la época en que se realizaron los hechos. También nos surgen interrogantes sobre temas no bíblicos. Así es que comenzamos con nuestro encuentro de esta semana. Las preguntas planteadas para esta semana y sus respectivas respuestas son las siguientes:
1 ¿POR QUÉ CELEBRAMOS LA NAVIDAD EL 25 DE DICIEMBRE? 
              2 ¿HUBO UNA ESTRELLA DE BELÉN? 
3 ¿NACIÓ JESÚS UNOS AÑOS ANTES DE CRISTO? 
4 ¿TIENE SENTIDO EL ÁRBOL DE NAVIDAD?
5 ¿QUIÉN ES REALMENTE SANTA CLAUS?
6. ¿Cuál ES EL ORIGEN DE LAS POSADAS?
7. ¿QUE UNA TRADICIÓN? 
8. ¿OCURRIÓ LA MATANZA DE LOS INOCENTES?
9. ¿EXISTEN ATERRADORAS TRADICIONES NAVIDEÑAS EN EL MUNDO?

1 ¿POR QUÉ CELEBRAMOS LA NAVIDAD EL 25 DE
DICIEMBRE?


Durante los primeros siglos los cristianos no tenían especial interés por la fecha del nacimiento de Jesús, puesto que lo que
se celebraba era su muerte y resurrección. Pero alrededor del siglo III se sintió el deseo de celebrar por separado su natividad. ¿Por qué se eligió el 25 de diciembre? Una idea muy extendida en la actualidad es la de que los cristianos se apropiaron de una fiesta pagana que se celebraba ese día. Se sabe que el emperador Aureliano el 25 de diciembre del 274 inauguró el nuevo templo al Sol Invicto en el Campus Agrippae. De ahí algunos deducen que los cristianos lo que hicieron fue apropiarse de esa fiesta. Sin embargo, esto es inverosímil, pues los cristianos, que aún estaban perseguidos, no iban a copiar una costumbre pagana. Además, no se corresponde con los datos históricos de los que se dispone. La explicación es otra. Por razones teológicas, se pensó que la fecha de la muerte de Jesús debía ser también la de su concepción. La creación (concepción) tenía que haberse producido el mismo día que la salvación (muerte de Jesús). Los teólogos del momento se pusieron a calcular la fecha exacta de la muerte de Jesús. En occidente se calculó que fue el 25 de marzo, que pasó a celebrarse como el día de la Encarnación. Existe un testimonio de Sexto Julio Africano del año 221 (mucho antes de la fiesta pagana iniciada el 274) de que el 25 de marzo se celebraba la Encarnación del Señor. De ello resultaba que la natividad del Señor fue el 25 de diciembre. En oriente se calculó que la fecha de la muerte de Jesús, y por tanto de su concepción, fue el 6 de abril; por eso allí la Epifanía del Señor (equivalente a la natividad) era el 6 de enero. Así, primero se celebró la Encarnación y, como consecuencia, a los 9 meses justos se comenzó a celebrar la Navidad. La primera referencia directa es la de un calendario litúrgico del año 354, en donde se dice “el 25 de diciembre nació Cristo en Belén de Judea”.



2 ¿HUBO UNA ESTRELLA DE BELÉN?

Según el Evangelio de San Mateo, los magos se ponen de camino porque “vimos su estrella en el Oriente” (Mt 2,2). ¿Qué hay de la  estrella de Belén? El Papa emérito Benedicto XVI, en su libro sobre la infancia de Jesús, se ocupó ampliamente de esta cuestión. Hoy sabemos que entre finales del año 7 y comienzos del 6 a.C. se produjo una conjunción de los planetas
Júpiter, Saturno y Marte. Ese mismo fenómeno se repitió el año 1609 y, en ese año, ello coincidió con la explosión de una supernova (que es una estrella débil que explota y produce una gran luminosidad), que fue visible durante una semana. Johanes Kepler pensó que la alineación de esos planetas y la aparición de una estrella de gran luminosidad se debió también producir en el año 7/6 antes de Cristo, con lo que creyó haber explicado la estrella de Belén. En el siglo XIX el investigador alemán Friedrich Wieseler encontró unas tablas cronológicas chinas en las que decía que en cierto año (que equivaldría más o menos al año 4 a.C.) “había aparecido y se había visto durante mucho tiempo una estrella luminosa”. Eso podía avalar la teoría de la supernova de Kepler. Más recientemente, el astrónomo italiano Ferrari d’Occhieppo (1907-2007) ha estudiado el asunto de la estrella de Belén, al que ha dedicado un libro. Este autor descarta la teoría de la supernova y concluye que la conjunción de Júpiter y Saturno, que efectivamente se produjo entre el año 7 y 6 a.C., es explicación suficiente. Júpiter representaba al principal dios babilónico. Saturno era el representante cósmico del pueblo judío. Júpiter, la estrella de la más alta divinidad de Babilonia, compareció en su apogeo junto a Saturno, el representante cósmico del pueblo judío. Los astrónomos de Babilonia podían deducir que un evento de importancia universal iba a acaecer en Judea. Y esto explica que los magos se pusieran de camino.

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3 ¿NACIÓ JESÚS UNOS AÑOS ANTES DE CRISTO?

Al hablar de la estrella de Belén dijimos que la alineación de planetas se produjo de 7 a 6 años antes de Cristo. Pero, ¿es que Jesús nació unos años antes de Cristo? ¿Cómo es ello posible? Existe una fácil explicación a esta aparente paradoja. Hasta el siglo VI en occidente el año en el que se estaba se identificaba con un número desde la fundación de imperio romano. El Papa Juan I, el año 550 de nuestra era, consideró que eso no podía seguir así. El nacimiento de Jesús es el centro y fin de toda la historia humana. Por ello su año de nacimiento debía iniciar el cómputo del tiempo. El Papa Juan I encargó al monje Dionisio el Exiguo (representado en la imagen) que calculara el año de nacimiento de Jesús a partir de la fundación de Roma, para iniciar así el nuevo cómputo del tiempo. Dionisio ubicó el nacimiento de Jesús unos dos años antes de la muerte de Herodes el Grande. Dató el año 753 de la fundación de Roma como el año de nacimiento de Jesús. Ese paso a ser el año 0 de la era cristiana. Pero se ha comprobado que se equivocó en los cálculos. Jesús debió de nacer alrededor del año 748 de la fundación de Roma. De este
modo, al haberse calculado equivocadamente el año 0 de nuestra era, resulta que se produce la paradoja de que tengamos que decir que Jesucristo nació aproximadamente 6 años antes de Cristo.




4 ¿TIENE SENTIDO EL ÁRBOL DE NAVIDAD?

En el corazón del invierno, en el que los árboles no tienen hojas, surge este árbol verde, símbolo de la vida. El árbol de
Navidad simboliza la nueva vida que trae Jesús. El árbol tiende hacia arriba, se dirige a Dios. Representa los brazos extendidos del hombre que se dirigen hacia Dios. En el árbol hay luces. Cada uno de nosotros hemos de ser una luz para quienes están a nuestro lado. La costumbre de colocar el árbol de Navidad se remonta a Alemania hacia el año 1605.En España se tiene noticias que el primer árbol de Navidad se colocó el año 1870. En 1982 se puso el primer árbol de Navidad en el Vaticano ¿EL BUEY Y EL ASNO EN EL PESEBRE? La tradición de situar un buey y un asno en el nacimiento de Jesús se derivó de la afirmación contenida en Lc 2,7, según la cual a Jesús se “lo recostó en un pesebre”, esto es, el cajón donde se ponía el alimento para los animales domésticos. En el evangelio no se habla para nada de la presencia de ningún animal, pero la imaginación completó el relato Estamos acostumbrados a imaginar un establo con animales como lugar de nacimiento de Jesús. Sin embargo, no es eso lo que dicen
los evangelios. De Mt 2, 11 se deduce que nació en una casa. Y la palabra griega“καταλύμα”, como han señalado los biblistas, no puede traducirse como “posada”, sino como “habitación” o “aposento”. Al niño Jesús lo recostaron en la parte de la casa donde normalmente estaban los animales porque no había lugar para ellos en la habitación preparada inicialmente para el parto, seguramente por estar ocupada por otros familiares. Lógicamente, esa dependencia estaba sin animales, y había sido limpiada y acondicionada con cuidado para la ocasión. Sin embargo, y como señaló Benedicto XVI en su libro sobre la infancia de Jesús, aunque no sea un dato histórico, “ninguna representación del nacimiento renunciará al buey y al asno”. Estos animales representan a la humanidad compuesta por judíos y gentiles. Una humanidad desprovista de entendimiento, pero que llega al Dios a través de la humildad del pesebre.

5 ¿QUIÉN ES REALMENTE SANTA CLAUS?

El origen de Santa Claus o Papá Noel está en San Nicolás, santo católico que vivió entre el siglo II y IIII, y que es muy popular entre nosotros. Por haber sido amigo de los niños, en su fiesta se repartían dulces y se hacían regalos. El año 1624 unos emigrantes holandeses fundaron la ciudad que luego será conocida como Nueva York y llevaron allí la devoción a San Nicolás. En 1809 el escritor Washington Irving escribió una sá- tira, Historia de Nueva York, en la que deformó al santo holandés, Sinterklaas, en la burda pronunciación inglesa de Santa Claus. En la difusión de la tradición de Santa Claus tuvo mucho que ver una conocida marca de refrescos que difundió su imagen en diversas campañas de publicidad que se iniciaron el año 1931. ¿POR QUÉ HACEMOS REGALOS EN NAVIDAD? En la Navidad celebramos que nuestra existencia, el universo, el cosmos, no es fruto del azar o de la casualidad. En el origen de todo hay un acto de amor del Creador, que se hace niño en un pesebre. La vida es un regalo de Dios, que nos crea por amor. Dios nos regala la vida por amor. Eso nos llena de alegría y de felicidad. En Navidad hemos recibido de Dios el regalo de Jesús hecho niño. Nosotros queremos corresponder  al regalo recibido haciendo nosotros también regalos a aquellos a los que amamos. Ese es el sentido profundo de los regalos de Navidad.


6. ¿Cuál ES EL ORIGEN DE LAS POSADAS?

Las tradiciones y costumbres son una manera de hacer presente lo que ocurrió, o lo que se acostumbraba hacer, en tiempos pasados. Son los hechos u obras que se transmiten de una generación a otra de forma oral o escrita. La palabra tradición viene del latín traditio que viene del verbo tradere, que significa entregar. Se podría decir que tradición es lo que nuestros antepasados nos han entregado.
En el caso de la Navidad, lo más importante de las tradiciones y costumbres no es sólo su aspecto exterior, sino su significado interior. Se debe conocer por qué y para qué se llevan a cabo las tradiciones y costumbres para así poder vivirlas mejor.
Existen muchas tradiciones y costumbres que se celebran en el tiempo de Adviento y de la Navidad. A continuación, presentaremos una de ellas con una pequeña explicación acerca de su significado y origen:
Las Posadas Origen de la tradición: Las posadas son fiestas que tienen como fin, preparar la Navidad. Comienzan el día 16 y terminan el día 24 de Diciembre.
Su origen se remonta a los tiempos de la conquista, cuando los españoles llegaron a México, los aztecas creían que durante el solsticio de invierno, el dios Quetzalcóatl (el sol viejo) bajaba a visitarlos. Cuarenta días antes de la fiesta, compraban los mercaderes a un esclavo en buenas condiciones y lo vestían con los ropajes del mismo dios Quetzalcóatl. Antes de vestirlo, lo purificaban lavándolo. Salían con él a la ciudad y él iba cantando y bailando para ser reconocido como un dios. Las mujeres y los niños le ofrecían ofrendas.
En la noche, lo enjaulaban y lo alimentaban muy bien. Nueve días antes de la fiesta, venían ante él dos "ancianos muy venerables del templo" y se humillaban ante él. Durante la ceremonia, le decían:
"Señor, sabrás que de aquí a nueve días se te acabará este trabajo de bailar y cantar porque entonces has de morir". Él debía responder: "Que sea muy en hora buena". Llegado el día de la fiesta, a media noche, después de honrarlo con música e incienso, lo tomaban los sacrificadores y le sacaban el corazón para ofrecérselo a la luna. Ese día en los templos se hacían grandes ceremonias, dirigidas por los sacerdotes, que incluían ritos y bailables sagrados, representando la llegada de Quetzalcóatl, así como ofrendas y sacrificios humanos en honor a él.
Durante el mes de diciembre, no sólo festejaban a Quetzalcóatl, sino que también celebraban las fiestas en honor a Huitzilopochtli. Estas fiestas duraban veinte días, iniciaban el 6 de diciembre y terminaban el 26 del mismo mes, eran fiestas solemnes que estaban precedidas por 4 días de ayuno y en las que se coronaba al dios Huitzilopochtli poniendo banderas en los árboles frutales. Esto es a lo que llamaban el "levantamiento de banderas".
En el gran templo ponían el estandarte del dios y le rendían culto. El pueblo se congregaba en los patios de los templos, iluminados por enormes fogatas para esperar la llegada del solsticio de invierno. El 24 de diciembre por la noche y al día siguiente, 25 de diciembre, había fiestas en todas las casas. Se ofrecía a los invitados una rica comida y unas estatuas pequeñas depasta llamada "tzoatl".
Los misioneros españoles que llegaron a México a finales del siglo XVI, aprovecharon estas costumbres religiosas para inculcar en los indígenas el espíritu evangélico y dieron a las fiestas aztecas un sentido cristianos, lo que serviría como preparación para recibir a Jesús en su corazón el día de Navidad.
En 1587 el superior del convento de San Agustín de Acolman, Fray Diego de Soria, obtuvo del Papa Sixto V, un permiso que autorizaba en la nueva España la celebración de unas Misas llamadas "de aguinaldos" del 16 al 24 de diciembre. En estas Misas, se intercalaban pasajes y escenas de la Navidad. Para hacerlas más atractivas y amenas, se les agregaron luces de bengala, cohetes y villancicos y posteriormente, la piñata.
En San Agustín de Acolman, con los misioneros agustinos, fue donde tuvieron origen las posadas.
Los misioneros convocaban al pueblo al atrio de las iglesias y conventos y ahí rezaban una novena, que se iniciaba con el rezo del Santo Rosario, acompañada de cantos y representaciones basadas en el Evangelio, como recordatorio de la espera del Niño y del peregrinar de José y María de Nazaret a Belén para empadronarse. Las posadas se llevaban a cabo los nueve días previos a la Navidad, simbolizando los nueve meses de espera de María. Al terminar, los monjes repartían a los asistentes fruta y dulces como signo de las gracias que recibían aquellos que aceptaban la doctrina de Jesús.
Las posadas, con el tiempo, se comenzaron a llevar a cabo en barrios y en casas, pasando a la vida familiar. Estas comienzan con el rezo del Rosario y el canto de las letanías. Durante el canto, los asistentes forman dos filas que terminan con 2 niños que llevan unas imágenes de la Santísima Virgen y de San José: los peregrinos que iban a Belén. Al terminar las letanías se dividen en dos grupos: uno entra a la casa y otro pide posada imitando a San José y la Santísima Virgen cuando llegaron a Belén. Los peregrinos reciben acogida por parte del grupo que se encuentra en el interior. Luego sigue la fiesta con el canto de villancicos y se termina rompiendo las piñatas y distribuyendo los "aguinaldos".
Significado de la tradición: Las posadas son un medio para preparar con alegría y oración nuestro corazón para la venida de Jesucristo, y para recordar y vivir los momentos que pasaron José y María antes del Nacimiento de Jesús.
Algo que no debes olvidar Debemos vivir las tradiciones y costumbres navideñas con el significado
interior y no sólo el exterior para preparar nuestro corazón para el nacimiento de Jesús.
Cuida tu fe Algunas personas te podrán decir que estas costumbres y tradiciones las ha inventado la gente para divertirse y los comercios para vender. Recuerda que hay mucho significado detrás de cada una y trata de vivir estas tradiciones con el sentido profundo que tienen. Así, el 24 de diciembre no solo será un festejo más, sino que habrás preparado tu corazón con un verdadero amor a Dios y a tu prójimo.
Utiliza el siguiente enlace para bajar la 
Letanía para pedir posada lista
para imprimir Si quieres conocer otras tradiciones navideñas consulta nuestro 
Especial de Navidad.




7. ¿QUE UNA TRADICIÓN
Del latín traditio, la tradición es el conjunto de bienes culturales que se transmite de generación en generación dentro de una comunidad. Se trata de aquellas costumbres y manifestaciones que  cada sociedad considera valiosas y las mantiene para que sean aprendidas por
las nuevas generaciones, como parte indispensable del legado cultural.
 Por ejemplo: comer un huevo de chocolate en Pascuas o un turrón en Navidad, almorzar pasta los domingos o vestir de negro en señal de luto son algunas tradiciones extendidas en varios países.
La tradición, por lo tanto, es algo que se hereda y que forma parte de la identidad. El arte característico de un grupo social, con su música, sus danzas y sus cuentos, forma parte de lo tradicional, al igual que la gastronomía y otras cuestiones.

El folklore y aquello que se considera como parte de la sabiduría popular también pertenecen al campo

d  la tradición. Es importante destacar que, muchas veces, la tradición se asocia a una visión conservadora, ya que implica mantener intactos ciertos valores a lo largo del tiempo. En este sentido, las creencias de quienes no se interesan por las tradiciones de su tierra o que intentan cambiarlas suelen ser vistas como rupturistas.

Los sociólogos advierten, sin embargo, que la tradición debe ser capaz de renovarse y actualizarse para mantener su valor y utilidad. Esto quiere decir que una tradición puede adquirir nuevas expresiones sin perder su esencia.

8. ¿OCURRIÓ LA MATANZA DE LOS INOCENTES?

Cada 28 de diciembre se conmemora en el mundo católico a los santos inocentes, esos que murieron según la Biblia por orden de Herodes, quien buscaba acabar con Jesús. Este relato de San Mateo ha recibido críticas de quienes lo consideran falso por distintas razones. Vamos a intentar responder a esos argumentos.
La historia nos narra que los Magos de Oriente, siguiendo la estrella llegaron a Jerusalén buscando al Salvador, y preguntaron a Herodes. Éste consultó a los escribas dónde debía nacer el Mesías y le informaron que en Belén, así que Herodes pidió a los Magos que le avisaran cuando lo encontraran para también ir a adorarlo. Las intenciones de Herodes eran realmente matar a Jesús pues no quería que su reinado se viera amenazado. Al ver que los Magos nunca volvieron, decidió mandar a matar a todos los niños en Belén menores de dos años. Sin embargo, Dios había avisado en sueños a José que huyera a Egipto. (Mt 2, 1-18)
Dentro de los argumentos que cuestionan la veracidad histórica de esta narración están:

1.  1. El texto es una construcción teológica no un hecho real
ocurrido 
Hay exegetas y académicos que consideran que esta narración debe entenderse como una construcción teológica del autor para querer dar un mensaje. Se atenta contra la historicidad misma del relato, y por ende de los Evangelios. Vamos a aportar algunas consideraciones del Magisterio de la Iglesia inicialmente, sobre la historicidad de las narraciones de Mateo.
Hay un documento elaborado por la Pontificia Comisión Bíblica en 1911 titulado: Quaestiones de evangelio secundum Matthaeum[1], en el cual se expone: VII. En particular, debemos considerar carente de fundamento sólido los puntos de vista de aquellos que dudan de la autenticidad histórica de los dos primeros capítulos, que se narran la genealogía y la infancia de
Cristo, así como una expresión de gran importancia dogmática, al igual que lo relativo a la primacía de Pedro (Mt 16,17-19), la forma del bautismo dado a los Apóstoles con la misión universal de la predicación (Mt 28,19s.), la profesión de fe de los apóstoles en la divinidad de Cristo (Mateo 14:33; ), y otra similar que en Mateo se exponen de una manera particular? Respuesta: Sí.
En otro documento de la Comisión Pontificia Bíblica titulado De
historica evangeliorum veritate
:
De hecho, algunos defensores de este método, motivados por prejuicios racionalistas, se niegan a reconocer la existencia del orden sobrenatural y la intervención de un Dios personal en el mundo, que se llevó a cabo a través de la revelación de sí mismo, y la posibilidad y la existencia de los milagros y
profecías. Otros parten de una falsa noción de la fe, como si esto no le importara a la verdad histórica, o incluso ser incompatible con ella. Otros niegan a priori el valor histórico y la naturaleza de los documentos de la revelación. Otros, por último, con poca consideración de la autoridad de los apóstoles como testigos de Jesucristo, así como su oficio y su influencia en la comunidad primitiva, exageran el poder creativo de esa comunidad. Todas estas cosas no sólo son contrarias a la doctrina católica, sino también falta base científica y van más allá de los principios correctos del método histórico[2].
Finalmente, el Concilio Vaticano II en su Constitución Dogmática Dei verbum afirma: Carácter histórico de los Evangelios 19. La Santa Madre Iglesia firme y constantemente ha creído y cree que los cuatro referidos Evangelios, cuya historicidad afirma sin vacilar, comunican fielmente lo que Jesús Hijo de Dios, viviendo entre los hombres, hizo y enseñó realmente para la salvación de ellos, hasta el día que fue levantado al cielo. Los Apóstoles, ciertamente, después de la ascensión del Señor, predicaron a sus oyentes lo que Él había dicho y obrado, con aquella crecida inteligencia de que ellos gozaban,

amaestrados por los acontecimientos gloriosos de Cristo y por la luz del Espíritu de verdad. Los autores sagrados escribieron los cuatro Evangelios escogiendo algunas cosas de las muchas que ya se trasmitían de palabra o por escrito, sintetizando otras, o explicándolas atendiendo a la condición de las Iglesias, reteniendo por fin la forma de proclamación de manera que siempre nos comunicaban la verdad sincera acerca de Jesús.

Escribieron, pues, sacándolo ya de su memoria o recuerdos, ya del testimonio de quienes "desde el principio fueron testigos oculares y ministros de la palabra" para que conozcamos "la verdad" de las palabras que nos enseñan (cf. Lc., 1,2-4)[3].
Por tanto, es arbitrario afirmar que Mateo se inventó una historia sólo para mostrar cómo fue lo acontecido luego del Nacimiento de Jesús. Sin embargo, la no historicidad de este relato encuentra otras justificaciones según quienes le niegan el carácter histórico y le buscan causas al por qué San Mateo lo colocó. Es cierto que para entender el sentido de los hechos narrados se requiere hacer uso de las herramientas de las que dispone la Exégesis pero no se puede de un solo golpe negar la historicidad de este relato.
El Papa Benedicto XVI, en una obra personal como teólogo llamada Jesús Nazareth, aborda el tema de los Magos de Oriente y la matanza de los infantes. Respecto a los cuestionamientos sobre la historicidad del relato hace aportes importantes y nos comparte la opinión de otros erúditos como Klaus Berger, quien afirma:
Hay que suponer, mientras no haya prueba en contra, que los evangelistas no pretenden engañar a sus lectores, sino narrarles los hechos históricos… Rechazar por mera sospecha la historicidad de esta narración va más allá de toda competencia imaginable de los historiadores (p.20)[4]

2.  2. No hay fuentes extrabíblicas que mencionen este

acontecimiento y Flavio Josefo no lo mencionó. Es cierto, no hay mención de este acontecimiento en ninguna otra fuente cercana que no sea el Evangelio de San Mateo. Pero esto no puede ser un argumento excluyente de la ocurrencia del hecho. Se apela a que Flavio Josefo, historiador judío del siglo I no menciona en Antigüedades, este hecho, siendo que narró muchos episodios de la vida de Herodes. ¿Qué podemos decir al respecto? Citemos inicialmente a Joseph Ratzinger, quien en su obra sobre la infancia de Jesús afirma:
“Es cierto que no sabemos nada sobre este hecho por fuentes que no sean bíblicas, pero, teniendo en cuenta tantas crueldades cometidas por Herodes, eso no demuestra que no se hubiera producido el crimen. En este sentido, Rudolf Pesch cita al autor judío Abraham Shalit:
'La creencia en la llegada o el nacimiento en un futuro inmediato del rey mesiánico estaba entonces en el ambiente. El déspota suspicaz veía por doquier traición y hostilidad, y una vaga voz que llegaba a sus oídos podía fácilmente haber sugerido a su mente enfermiza la idea de matar a los niños nacidos en el último período. La orden por tanto nada tiene de imposible” (en Pesch, p.72)”[5].
Esto que nos hace ver Ratzinger, sobre la crueldad de Herodes es algo evidente para quien investigue su vida. Herodes fue un ser despiadado y sanguinario, dispuesto a lo necesario para mantenerse en el poder. Flavio Josefo si bien no narró la matanza de los infantes, narró que Herodes llegó a matar:
  •           Al líder Antígono (de los Asmoneos) y a 45 hombres de Antígono[6]
  •           A su hermanastro Aristóbulo
  •           Su esposa Marianne
  •           A la madre de Marianne
  •           Sus hijos con Marianne: Alejandro y Aristóbulo
  •           Su primer hijo Antípatro
  •           A muchos de los que pensaba querían quedarse con su trono.
Los libros XV al XVII de su obra Antigüedades nos muestran estos hechos. ¿Si a un rey no le importó la vida de su esposa e hijos, le importaría la vida de unos niños de un pobre pueblo? Incluso, el historiador Macrobio, en su obra Saturnales, llegó a escribir lo siguiente:
Puesto que había oído que entre los niños que con menos de dos años ordenó matar en Siria el rey de los judíos, Herodes, había muerto incluso un hijo suyo, dijo: Es mejor ser un cerdo de Herodes que un hijo[7].
Lo interesante de esta cita es que es de una fuente pagan, y aunque es tardía, siglo IV, nos muestra el pensamiento de Augusto, el cual es acorde a la forma brutal de actuar de Herodes, en donde sus hijos corrieron peor destino que los mismos cerdos.
Dentro de las posibles explicaciones del por qué Josefo no narró la
matanza de los inocentes, está el que la noticia no fue relevante por la cantidad de niños asesinados y el lugar donde ocurrió. Sobre esto, Manuel Murillo en un artículo publicado nos informa que en Belén en ese momento debió tener alrededor de 800 habitantes, por lo que la cifra de nacimientos podía ser alrededor de 20 nacimientos[8]. De esta forma, que murieran 20 niños en un pequeño pueblo de Judea no debía ser un acontecimiento de importancia para Josefo, pues era sólo una de las comunes muestras de crueldad de Herodes. Así, si lo que narrara San Mateo fuera algo contrario a la personalidad y carácter
de Herodes, serían de pronto válidas las críticas a este relato, pero resulta lo contrario, y eran totalmente del estilo de actuar de Herodes. Las cifras apócrifas que hablaban de 3000 niños muertos son simplemente fantasía[9]

Otra posible alusión a la matanza de los inocentes, y menciono alusión porque el texto no lo menciona pero nos deja un paralelo que podríamos establecer. Hay un texto apócrifo llamado la Asunción de Moisés, quien en el capítulo 6 hace mención de Herodes en estos términos: “A espada eliminará a los principales de entre ellos y en lugares desconocidos hará desaparecer sus cuerpos, para que nadie sepa dónde están sus cuerpos. A ancianos y jóvenes matará sin miramientos. Entonces habrá entre ellos, en su país, un intenso miedo a él. Durante treinta y cuatro años los sojuzgará como los habían sojuzgado los egipcios y les impondrá penalidades[10]
Lo interesante de esta cita del apócrifo es la descripción de Herodes de la forma en que el Faraón actuó con los israelitas en Egipto. Sabemos que Faraón mandó a matar a los infantes israelitas, y es muy diciente que sin mencionar la matanza de Herodes, se compare a Herodes con los egipcios, pues nos deja mayor espacio para no ver como descabellada la veracidad histórica.

3.      Este relato sería una adaptación de otros relatos como la vida de Moisés Otro de los argumentos en contra sobre la veracidad de la matanza es que sería una copia de la niñez de Moisés para mostrar a Jesús como el nuevo Moisés. Sobre esto se muestran paralelos como la orden de un tirano por matar niños, y la valentía de unos padres por salvar su vida. Así, San Mateo sólo reelabora la historia para mostrar cumplimiento en Jesús. Pero hay muchas diferencias entre ambos relatos:
  •           La orden de Faraón no es para acabar con un niño en particular
  •           La orden de Faraón es para evitar el aumento de israelitas y su apoyo a algún enemigo
  •           Moisés no huyó de Egipto, fue criado ahí
  •           Moisés vivió en el palacio de Faraón
No podemos negar que Jesús venga a liberar a Israel, y Moisés sea un “tipo” de Jesús pero eso es muy diferente a que sea la misma historia adaptada.
Sin embargo, es evidente que San Mateo conocía el relato del Éxodo y en esa clave coloca la profecía de Oseas sobre el llamado de Egipto, y la de Jeremías sobre los hijos de Raquel:
“Se escucha un grito en Ramá, gemidos y un llanto amargo: Raquel, que
llora a sus hijos, no quiere ser consolada, pues se ha quedado sin ellos” (
Jr 31,15; Mt 2,18).
Para la época de San Mateo, la tumba de Raquel se encontraba en las proximidades de Belén, por lo que el Evangelista encuentra un punto de reflexión teológica entre el acontecimiento de la matanza ocurrido, y lo escrito en el profeta Jeremías.
Pero si existiera una historia que pudiera asemejarse más sería la Haggadah de Moisés que menciona Flavio Josefo, en donde se tendría el anuncio al Faraón de un niño que liberaría al pueblo y de un padre que es avisado en sueños de que debe salvar a su hijo. Ante esto Ratzinger deja ver que no son suficientes las similitudes para concluir que la narración del Evangelio seauna variante cristiana del relato de Moisés, sobre todo porque el texto de Josefo es posterior a la composición del Evangelio de Mateo[11].
Para quienes no consideran que sea propiamente una adaptación de la vida de Moisés, consideran entonces que sea una adaptación de la creencia de que un niño perseguido por el tirano gobernante. Daniel Vólter en su Die evangelische Erzühlungen von der Geburt und Kindheit Jesu (Estrasburgo 1911, 82-130), siguiendo a Soltau y a Petersen, cree encontrar el precedente (matanza de niños ordenada por un tirano para librarse de un posible competidor) en la Vita Augusti de Suetonio (cap. 94), donde se cuenta que pocos
meses antes de nacer Augusto acaeció un fenómeno de mal agüero en el cual se vio el anuncio del nacimiento de un rey en Roma, cosa que el Senado trató de evitar ordenando el exterminio de los niños que nacieran aquel año, si bien los maridos de las mujeres encintas consiguieron que el edicto no se llevara a efecto. Pero es obvio que Mt no puede estar influido por eso ya que Suetonio dedicó sus Vitae Caesarum al prefecto Septitio Claro (a. 119-121), o sea mucho después de la fecha de composición de S. Mateo[12].
En una página atea lanzan la siguiente acusación: La leyenda de la “matanza de los inocentes” en la época de Moisés y que luego fue “copiada” por Mateo, probablemente surge de la leyenda hindú del asesinato de inocentes niños que sucedió cuando nació el dios Krishna. Cuando éste nació, el sabio volador Nárada Muni habló con el malvado rey Kamsa de Mathura y le dijo que este bebé estaba destinado a matarle. Como el rey no conocía el paradero de Krishna, mandó matar a todos los kumaras (en sánscrito literalmente “muere fácil”, bebé de menos de dos años de edad) de la zona de Mathura. Krishna habría nacido en julio del año 3228 a. C.[13]
Es cierto que en la leyenda de Krishna esto ocurre, pero lo que no dice la página atea es qué estos textos sobre Krishna son tardíos y no anteriores al Evangelio de San Mateo. Es en el Harivamsa en donde se narra la historia de Krishna tal como de quien es querido matar por su tío Kamsa para no ser derrocado, y es entonces cuando a Krishna lo protegen y lo llevan a vivir fuera de Mathura.
Henry Charles Puech en su obra “Historia de las Religiones” nos deja entrever que el Harivamsa es un texto posterior al siglo IV, y el Bhagavata Purana es de quinientos años posterior[14], y es en estos textos en donde se nos narra la historia de Krishna como similar a la de San Mateo. Por su parte Farquhar nos arroja que el Harivamsa es del siglo VIII d.C[15]. ¿Cómo pueden los ateos acusar a que la historia de la matanza de los infantes es copia de la vida de Krishna cuando el Evangelio fue escrito siete siglos antes que el Harivamsa? Como afirma la
Enciclopedia Católica: 
Pero resulta ser todo lo contrario. Todos los Indianistas autorizados están de acuerdo de que estas leyendas de Krishna no son anteriores al siglo séptimo de la Era Cristiana y deben haber sido tomadas de fuentes Cristianas[16]
4.      Este relato mostraría la crueldad de Dios por no proteger la vida de los infantes y el egoísmo de San José que no avisó a los otros padres
El argumento del dilema moral siempre ha sido utilizado por quienes no
creen en Dios, incluso ha sido usado como argumento por los mismos católicos,
quienes no podrían comprender a un Dios de amor que actúa así, véase por
ejemplo lo que afirma el sacerdote colombiano eudista Alberto Linero[17] quien asegura que: “sería un
egoísmo extraño que no cabría en Dios”.
Pero la acción del mal moral se ve de muchas formas y sabemos que no es
por deseo de Dios. ¿Acaso todo el mal que produce el pecado no es por deseo del
hombre que rechaza la gracia?, y Dios que respeta la libertad del ser humano,
no violenta la conciencia del hombre.
Como nos enseña el Catecismo:
Creemos firmemente que Dios es el Señor del mundo y de la historia. Pero
los caminos de su providencia nos son con frecuencia desconocidos. Sólo
al final, cuando tenga fin nuestro conocimiento parcial, cuando veamos a Dios
"cara a cara" (1 Co 13, 12), nos serán plenamente conocidos los
caminos por los cuales, incluso a través de los dramas del mal y del pecado,
Dios habrá conducido su creación hasta el reposo de
ese Sabbat (cf Gn 2, 2) definitivo, en vista del cual creó
el cielo y la tierra
 [CIC 314]

Una página atea incluso llega a afirmar:
Es curioso que José al enterarse de que los niños de Belén serían
asesinados no le avisase a nadie del pueblo. ¿Qué clase de persona tan egoísta
puede ser José que huye sin alertar ni siquiera a una persona?[18]
Tratemos de analizar esto, pues los ateos se dicen ser racionales. San José toca la puerta de otros vecinos, gente que no lo conocen porque no vivía allí, una cosa es que su ascendencia fuera de ahí y otra que lo conocieran de siempre. Llega y les dice que deben huir con sus hijos porque Dios en sueños le ha avisado que a su hijo lo quieren matar porque ese bebé es el Mesías esperado, y que debe huir a Egipto a cientos de kilómetros. ¿En serio piensa un ateo que le hubieran creído a San José? Es ridícula la acusación de egoísmo a San José. Además, ¿qué fue lo que Dios le reveló en sueños a San José?
Después de la partida de los magos, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y permanece allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo". José se levantó, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto. Allí permaneció hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera lo que el Señor había anunciado por medio del Profeta: Desde Egipto llamé a mi hijo. (Mt 2, 13-15)
Hay que recordarle a los ateos que esto fue un “sueño” no una conversación telefónica. Segundo, que en el sueño no le dicen a José que Herodes vaya a matar a los niños del pueblo, sino que busca matar a Jesús. ¿Por qué debía San José suponer que Herodes mataría a todos los niños menores de dos años? ¿Acaso los Magos de Oriente le dijeron a José de su encuentro con Herodes? Son acusaciones sin fundamento que hacen los ateos.
Si el argumento para considerar válido el texto de la matanza de los
inocentes fuera que Dios por ser amor no permitiría que murieran inocentes, habría que quitar varias páginas de la Biblia. Por ejemplo la muerte de San Esteban tampoco sería por la forma en que murió siendo que era inocente. O las muchas muertes de los mártires en los primeros siglos serían falsas por la forma en que Dios dejaría que ellos murieran. 
Hay que recordar bien las palabras de Cristo: no teman a los que matan el cuerpo pero no pueden matar el alma (Mt 10, 28). La muerte física no es el término de nuestra existencia. Tenemos esperanza en la resurrección y ese el verdadero regalo de nuestro Dios. Esos bebés asesinados seguro están en la presencia de Dios gozando eternamente. No podemos considerar una muerte prematura como un acto de egoísmo o crueldad de Dios.
Celebración en la Liturgia La matanza de los inocentes es un hecho que quedó registrado en las celebraciones litúrgicas de Oriente y Occidente. Los latinos la celebramos el 8 de diciembre, los griegos el 27 y los sirios y caldeos el 29 de diciembre.
No se sabe la fecha exacta en que la matanza ocurrió, pero se ha querido dejar en la octava de Navidad, es decir la semana siguiente a la celebración del nacimiento de Cristo, porque estos bebés dieron su vida por el nacimiento de Cristo[19]Esta fecha por tanto nos debe hacer rememorar a cuantos infantes son asesinados en el mundo. Cuántos mueren diariamente por el aborto y por otra clase de causas lamentables. Este día debería recordarnos a esos niños y no servir para hacer bromas y burlas como se acostumbra también desde hace tiempo.
Esto de las bromas tiene su historia también y supuestamente evoca el ser juguetón y alegres de aquellos bebés cuya vida fue quitada por el afán de poder de Herodes.  Oremos por todos los infantes


9. ¿EXISTEN ATERRADORAS TRADICIONES NAVIDEÑAS EN EL MUNDO?

Por medio del siguiente video doy respuesta a su interesante pregunta.